martes, 2 de agosto de 2011

Coger y morir no tienen adjetivos

Solamente en las noches

escribiendo
he pedido, he perdido.

en esta noche en este mundo
abrazada a vos,
alegría del naufragio.

he querido sacrificar mis días y mis semanas
en las ceremonias del poema.

he implorado tanto
desde el fondo de los fondos
de mi escritura.


Coger y morir no tienen adjetivos.
                                                   (A. P.)

More than I could stand


Love is a losing game

Why do I wish I never played?

martes, 26 de julio de 2011

lunes, 25 de julio de 2011

¿Quién muere?

Muere lentamente quien se transforma en esclavo del habito, repitiendo todos los días los mismos trayectos, quien no cambia de marca, no arriesga vestir un color nuevo y no le habla a quien no conoce.

Muere lentamente quien hace de la televisión su gurú.

Muere lentamente quien evita una pasión, quien prefiere el negro sobre blanco y los puntos sobre las "ies" a un remolino de emociones, justamente las que rescatan el brillo de los ojos, sonrisas de los bostezos, corazones a los tropiezos y sentimientos.

Muere lentamente quien no voltea la mesa cuando esta infeliz en el trabajo, quien no arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien no se permite por lo menos una vez en la vida, huir de los consejos sensatos.



Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no oye música, quien no encuentra gracia en sí mismo.

Muere lentamente quien destruye su amor propio, quien no se deja ayudar.

Muere lentamente, quien pasa los días quejándose de su mala suerte o de la lluvia incesante.

Muere lentamente, quien abandona un proyecto antes de iniciarlo, no preguntando de un asunto que desconoce o no respondiendo cuando le indagan sobre algo que sabe.

Evitemos la muerte en suaves cuotas, recordando siempre que estar vivo exige un esfuerzo mucho mayor que el simple hecho de respirar.
Solamente la ardiente paciencia hará que conquistemos una espléndida felicidad.

Pablo Neruda

martes, 19 de julio de 2011

I need the eggs

Alvy Singer: After that it got pretty late, and we both had to go, but it was great seeing Annie again. I... I realized what a terrific person she was, and... and how much fun it was just knowing her; and I... I, I thought of that old joke, y'know, the, this... this guy goes to a psychiatrist and says, "Doc, uh, my brother's crazy; he thinks he's a chicken." And, uh, the doctor says, "Well, why don't you turn him in?" The guy says, "I would, but I need the eggs." 



Well, I guess that's pretty much now how I feel about relationships; y'know, they're totally irrational, and crazy, and absurd, and... but, uh, I guess we keep goin' through it because, uh, most of us... need the eggs.

martes, 12 de julio de 2011

La mitad

Por Fito Páez*

Esta es la columna de Fito Páez que salió publicada ayer en la contratapa de Página/12. 

Nunca Buenos Aires estuvo menos misteriosa que hoy. Nunca estuvo más lejos de ser esa ciudad deseada por todos. Hoy hecha un estropajo, convertida en una feria de globos que vende libros igual que hamburguesas, la mitad de sus habitantes vuelve a celebrar su fiesta de pequeñas conveniencias. A la mitad de los porteños le gusta tener el bolsillo lleno, a costa de qué, no importa. A la mitad de los porteños le encanta aparentar más que ser. No porque no puedan. Es que no quieren ser. Y lo que esa mitad está siendo o en lo que se está transformando, cada vez con más vehemencia desde hace unas décadas, repugna. Hablo por la aplastante mayoría macrista que se impuso con el límpido voto republicano, que hoy probablemente se esconda bajo algún disfraz progresista, como lo hicieron los que “no votaron a Menem la segunda vez”, por la vergüenza que implica saberse mezquinos.

Aquí la mitad de los porteños prefiere seguir intentando resolver el mundo desde las mesas de los bares, los taxis, atontándose cada vez más con profetas del vacío disfrazados de entretenedores familiares televisivos porque “a la gente le gusta divertirse”, asistir a cualquier evento público a cambio de aparecer en una fotografía en revistas de ¿moda?, sentirse molesto ante cualquier idea ligada a los derechos humanos, casi como si se hablara de “lo que no se puede nombrar” o pasar el día tuiteando estupideces que no le interesan a nadie. Mirar para otro lado si es necesario y afecta los intereses morales y económicos del jefe de la tribu y siempre, siempre hacer caso a lo que mandan Dios y las buenas costumbres.

Da asco la mitad de Buenos Aires. Hace tiempo que lo vengo sintiendo. Es difícil de diagnosticarse algo tan pesado. Pero por el momento no cabe otra. Dícese así: “Repulsión por la mitad de una ciudad que supo ser maravillosa con gente maravillosa”, “efecto de decepción profunda ante la necedad general de una ciudad que supo ser modelo de casa y vanguardia en el mundo entero”, “acceso de risa histérica que aniquila el humor y conduce a la sicosis”, “efecto manicomio”. Siento que el cuerpo celeste de la ciudad se retuerce en arcadas al ver a toda esta jauría de ineptos e incapaces llevar por sus calles una corona de oro, que hoy les corresponde por el voto popular pero que no está hecha a su medida.

No quiero eufemismos.

Buenos Aires quiere un gobierno de derechas. Pero de derechas con paperas. Simplones escondiéndose detrás de la máscara siniestra de las fuerzas ocultas inmanentes de la Argentina, que no van a entregar tan fácilmente lo que siempre tuvieron: las riendas del dolor, la ignorancia y la hipocresía de este país. Gente con ideas para pocos. Gente egoísta. Gente sin swing. Eso es lo que la mitad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires quiere para sí misma.

* Vecino de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Infórmese

Los medios de comunicación exaltan los logros de la gestión de Macri (Metrobús, Policía Metropolitana y bicisendas) y acallan sus gravísimos desaciertos. Por eso sólo quiere debatir en TN (grupo Clarín) que oculta que:



  • Se encuentra procesado por el caso de las escuchas telefónicas, sospechado de construir una red de espionaje pagada con nuestros impuestos.
  • Aumentó un 300% el impuesto ABL (Alumbrado, Barrido y Limpieza). Sin embargo, la ciudad está cada día más llena de basura.
  • Prometió regularizar la situación de los cartoneros. Sólo les dio un uniforme.
  • Le otorgó al grupo Clarín una licitación por 275 millones de dólares, para repartir computadoras que valen menos de la mitad.
  • Apoyó la participación de represores y aliados de la dictadura en el gobierno de la ciudad.
  • Vetó 77 leyes votadas por la Legislatura, la mayoría de ellas sobre políticas sociales y algunas presentadas por su propio partido.
  • Cerró centros culturales en todos los barrios y, con ellos, los teatros, cines, grupos de música y actividades que fomentaban la participación de los vecinos.
  • Está en conflicto con los músicos del Teatro Colón, con los docentes de las escuelas públicas y hasta con los alumnos.
  • Cerró cursos gratuitos de capacitación laboral en el Centro Cultural Ricardo Rojas.
  • Vació los hospitales públicos, que se encuentran sin insumos básicos como el gas o equipamientos médicos como tomógrafos.
  • Las escuelas públicas continúan sin gas y con serios problemas edilicios que incluyen el riesgo de derrumbes.
  • No controló la construcción en la ciudad, ocasionando pérdida de patrimonio arquitectónico y derrumbes con víctimas fatales.
  • No cumplió con su promesa de construir diez kilómetros de subte por año. En cambio, hizo el Metrobús, que en diez días ya protagonizó dos accidentes viales.
  • Ensanchó la brecha económica y social entre el norte y el sur de la ciudad, colaborando a que se incremente la inseguridad.
  • Fomentó el accionar de verdaderos “grupos de tareas” que golpean y maltratan a las personas en situación de calle, al mismo tiempo que vetó leyes que promovían beneficios para construir comedores y alojamientos temporarios.
  • Generó un completo desconocimiento de la nueva ley de comunas, además de pretender recortar el poder a los nuevos representantes de cada barrio en el gobierno.
A todo esto se suma su completa ignorancia sobre historia argentina (confundió el Día de la Bandera con el Día de la Independencia, por ejemplo), su menosprecio por la cultura popular, su falta de conocimiento sobre los problemas de la ciudad e incluso sobre las políticas de su propia gestión, además de su intolerancia y su incapacidad para resolver los problemas más profundos.
Estamos ante la oportunidad de terminar con esta política basada en la ignorancia, el ajuste económico y el desprecio por la cultura, la educación y la salud.

  •  VOTE A CONCIENCIA.
  • AYUDE A LOS DEMÁS A VOTAR CON INFORMACIÓN.
  • NO VOTE POR QUIEN LE CAE SIMPÁTICO O QUIEN TIENE LOS CARTELES MÁS LINDOS.
  • VOTE CON CONOCIMIENTO.
  • IMPIDA QUE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN ESCONDAN LA INFORMACIÓN.
  • LA CIUDAD ES MÁS QUE BICISENDAS, POLICÍA Y METROBÚS.
  • LA CIUDAD ES EDUCACIÓN, CULTURA Y SALUD Y ESTÁ SIENDO DESTRUIDA POR MACRI.
  Difunda. Infórmese. Elija un proyecto, no una publicidad pasajera. Es por el bien de todos.

En ese mismo rubro

TRISTEZAS
Por Martín Kohan

La eliminación del rubro 59, según acaba de disponer el Gobierno nacional, habrá de ser seguramente celebrada por los defensores de la libertad sexual. Porque en este rubro, al igual que en tantos otros, la libertad de mercado resulta contraproducente, o directamente enemiga, para otra clase de libertades más sustanciales. En un negocio en el cual determinadas personas, en razón de apremios o ambiciones de dinero, se ven en la necesidad de mantener relaciones sexuales con quienes de por sí no serían objeto de su deseo ni de su elección, se extingue cualquier libertad valedera, la sexual en primer término, como tiene que ocurrir toda vez que el deseo o la elección se ven postergados o abolidos.

He leído con la mayor atención el rubro 59. Lo hice, y espero que se me crea, por razones específicamente literarias. A diferencia de otros medios empleados para la oferta sexual, como por ejemplo Internet o los papelitos insertados en los teléfonos públicos de la Ciudad, los avisos del rubro 59 presentaban concentrados narrativos poderosos. Los microrrelatos, como género, se han puesto bastante de moda. Los avisos clasificados los promueven de manera espontánea: los avisos fúnebres son microrrelatos del dolor, los avisos de San Valentín son microrrelatos de amor, los avisos del rubro 59 eran microrrelatos eróticos.

Por supuesto que es mejor que no existan más. Aunque no por eso dejen de existir ni los otros medios de oferta ni mucho menos la propia prostitución. Los microrrelatos eróticos del rubro 59 escondían, pero mal, un substrato de humillación y desdoro, de indignidad y rencor. El astrólogo de Arlt pudo suponer que con ese rencor, el de los humillados, podía hacerse una revolución, financiada en lo económico por un sistema de prostíbulos. Pero esa idea no prospera, ni siquiera en Los siete locos.

He notado, eso sí, que la decisión de eliminar el rubro 59 se anunció en defensa de la condición de las mujeres. Un propósito tan noble no merece otra cosa que adhesión. Pero en el rubro 59 se ofertaban igualmente servicios sexuales de varones. ¿Por qué de ellos no se dijo nada? ¿Acaso porque son, cuantitativamente, muchos menos? ¿Se los está discriminando entonces, por ser minoritarios, tal como ocurre con los avisos oficiales sobre violencia doméstica? ¿O será tal vez porque un resto inamovible de machismo, incrustado en el feminismo al uso, no deja de suponer que al destacar las medidas de gran escala del busto de una mujer se la reduce a mero objeto, pero al destacar medidas también de gran escala del miembro de un varón se le brinda motivo de orgullo? ¿No será porque en el fondo se sigue suponiendo, según el machismo pretende, que ahí donde la mujer eventualmente padece el varón va a pasarla siempre bien?

Tal vez no es nada de esto, sino que no se hizo una lectura a fondo del rubro 59. Aunque en su título la sección ya declaraba: “Servicios útiles para la mujer y el hombre”, y hablaba por igual tanto de unos como de otros.

viernes, 15 de abril de 2011

The Log Lady

The Log Lady: I carry a log - yes. Is it funny to you? It is not to me. Behind all things are reasons. Reasons can even explain the absurd. Do we have the time to learn the reasons behind the human being's varied behavior? I think not. Some take the time. Are they called detectives? Watch - and see what life teaches.



The Log Lady: There is a sadness in this world, for we are ignorant of many things. Yes, we are ignorant of many beautiful things - things like the truth. So sadness, in our ignorance, is very real. The tears are real. What is this thing called a tear? There are even tiny ducts - tear ducts - to produce these tears should the sadness occur. Then the day when the sadness comes - then we ask: "Will this sadness which makes me cry - will this sadness that makes my heart cry out - will it ever end?" The answer, of course, is yes. One day the sadness will end.

jueves, 10 de marzo de 2011

Dentaduras

¡Bienvenido, Mario!

Por Martín Kohan | 04.03.2011|Perfil.com


      Ahora lamentablemente habrá que esmerarse en cortesías con el bueno de Vargas Llosa. Ahora lamentablemente habrá que poner especial cuidado en dispensarle gentilezas. Se ha vuelto al parecer más difícil hacer lo que yo creo que habría convenido: dejarlo venir, pronunciar su discurso inaugural en nuestra modesta Feria del Libro, y dejarlo partir por fin hacia su próxima feria y su próxima condecoración literaria. Quienes prefieran mantenerse más bien al margen del ejercicio de la sandez política, desoírlo; y pelearlo los que gusten de feroces polémicas.

Todo eso se ha vuelto ahora más difícil. Ahora habrá que ser esmeradamente amables con él; agasajarlo con carne argentina, llevarlo a bailar el tango y recordarle a cada momento que José de San Martín, el gran Libertador argentino, fue también Libertador del Perú. Cagarnos en sus declaraciones políticas es un plan que acaba de complicarse mucho. Se complicó también la opción de destrozar a pura pasión los agravios retóricos de su consabida opinología. Yo no creo demasiado en estos campeones de la libertad y la tolerancia: hay que ver los monstruitos que pueden llegar a brotarles de adentro cuando ciertos intereses empiezan a verse afectados. Pero es un error, y ese error fue ya cometido, dar el paso ofensivo a destiempo. Porque de ese modo se le obsequia al paladín de la contemporización galante la oportunidad de colgarse en su solapa todavía una medalla más: desde México, según acabo de leer, Vargas Llosa nos hace saber que no está molesto, que no está enojado, que no está ofendido.

Quienes fueron más papistas que la Papisa (que, en cambio, pescó al vuelo cómo venía la mano), ahora tendrán que mostrarse más papistas que este Papa: fingirse habermasianos, aunque les tire Jauretche, y debatir con Vargas Llosa con una mesurada sobriedad de diplomáticos, una que acaso les resultará tan incómoda, pero también tan indispensable, como el frac endurecido a los que tienen que viajar a Estocolmo para recibir un Premio Nobel. Somos los que deploramos los pareceres políticos de Mario Vargas Llosa los que ahora tenemos que esmerarnos más: nos obliga la circunstancia. Postrado en su cama madrileña por voluntad y por vocación, Onetti solía saludar a las visitas que llegaban a verlo con una exquisita disculpa de rigor: “Perdoná que te reciba sin los dientes, pero se los tuve que prestar a Vargas Llosa”. La verdad de escritor de Onetti se alojaba en esa frase no menos que la verdad de escritor de Vargas Llosa. Su sonrisa encantada es también encantadora. Como dice las cosas que dice, podríamos muy bien haber ofrecido a esa sonrisa los dientes recios de nuestro mejor gruñido. Pero ahora se nos puso más difícil, ahora hasta tendremos que sonreírle; aunque más no sea para quitarle la razón que cree que tiene con sus sermones de inspiración liberal y sus lecciones sobre conductas ecuánimes.

¿Qué les pasa? ¿No les sale? Es cuestión de practicar un poco. Prueben conmigo, hagan el intento: ¡Bienvenido, Mario, a la Argentina!

miércoles, 9 de marzo de 2011

Quiero escribir, pero me sale espuma!!

Intensidad y altura

Quiero escribir, pero me sale espuma,
quiero decir muchísimo y me atollo;
no hay cifra hablada que no sea suma,
no hay pirámide escrita, sin cogollo.

Quiero escribir, pero me siento puma;
quiero laurearme, pero me encebollo.
No hay toz hablada, que no llegue a bruma,
no hay dios ni hijo de dios, sin desarrollo.

Vámonos, pues, por eso, a comer yerba,
carne de llanto, fruta de gemido,
nuestra alma melancólica en conserva.

Vámonos! Vámonos! Estoy herido;
Vámonos a beber lo ya bebido,
vámonos, cuervo, a fecundar tu cuerva.

César Vallejo - Poemas humanos

viernes, 4 de marzo de 2011

Mas sobre filósofos y gatos

Qué suerte excepcional la de ser un sudamericano y especialmente un argentino que no se cree obligado a escribir en serio, a ser serio, a sentarse ante la máquina con los zapatos lustrados y una sepulcral noción de la gravedad–del–instante. Entre las frases que más amé premonitoriamente en la infancia figura la de un condiscípulo: “¡Qué risa, todos lloraban!”. Nada más cómico que la seriedad entendida como valor previo a toda literatura importante (otra noción infinitamente cómica cuando es presupuesta), esa seriedad del que escribe como quien va a un velorio por obligación o le da una friega a un cura. Sobre este tema de los velorios tengo que contar algo que le escuché una vez al doctor Alejandro Gancedo, pero primero me vuelvo al gato porque ya es hora de explicar por qué se llama Teodoro. En una novela que se está cocinando a fuego lento había un pasaje que suprimí (en esa novela ya se verá que he suprimido tantas cosas que, como diría Macedonio, si suprimo una más no cabe) y en ese pasaje tres argentinos nada serios ni importantes discutían el problema de los suplementos dominicales de los diarios porteños y temas conexos en la forma siguiente: Tal vez ya se nombró a un gato negro; es tiempo de indicar que se llamaba Teodoro en homenaje indirecto al pensador alemán, y que el nombre se lo habían puesto Juan, Calac y Polanco después de prolijas glosas sobre los materiales literarios que algunas tías fieles les mandaban desde el Río de la Plata y en los que algunos sociólogos hechos más bien a dedo abundaban en citas del célebre Adorno, cuyo vistoso apellido parecían querer aprovechar literalmente cosa de que sus ensayos les quedaran padre. Se estaba en un tiempo en que casi todos los artículos de ese tipo aparecían constelados de citas de Adorno y también de Wittgenstein, razón por la cual Polanco había insistido en que el gato merecía que lo bautizaran Tractatus, moción mal recibida por Calac, Juan y el mismo gato que en cambio no parecía nada deprimido por llamarse Teodoro.
Cortázar y Teodoro

  Según Polanco, que era el más viejo, veinte años atrás y por razones análogas el gato habría tenido que llamarse Rainer María, un poco más tarde Albert o William —averigua averiguador—, y posteriormente Saint–John Perse (gran nombre para un gato, si se lo mira bien) o Dylan. Agitando viejos recortes de periódicos patrios ante los ojos estupefactos de Juan y Calac, era capaz de demostrar incontrovertiblemente que los sociólogos colaboradores en esas columnas debían ser en el fondo el mismo sociólogo, y que lo único que iba cambiando a lo largo de los años eran las citas, es decir que lo importante era estar a la moda en esa materia y evitar–so–pena–de–descrédito toda mención de autores ya usados en el decenio anterior. Pareto, mala palabra. Durkheim, cursilería. Apenas llegaban los recortes, los tres tártaros averiguaban enseguida de qué se había ocupado en esas semanas el sociólogo, sin que los preocuparan las diversas firmas al pie de los artículos puesto que lo único interesante era descubrir cada tantos centímetros la cita de Wittgenstein o de Adorno sin lo cual no había artículo concebible. “Esperá un cacho —decía Polanco—, vas a ver que pronto le toca el turno a Levi–Strauss, si es que ya no empezó, y entonces agárrense fuerte, pibes”. Juan se acordaba de paso que los blue jeans más prestigiosos en los USA eran fabricados por un tal Levi–Strauss, pero Calac y Polanco le hacían notar que se estaba saliendo de la cuestión y los tres pasaban entonces a investigar las últimas actividades de la gorda.


Mi Teodoro (y Evo de yapa.)

Lo de la gorda era propiedad casi exclusiva de Calac, que se sabía de memoria docenas de sonetos de la celebrada poeta y los recitaba intercambiando cuartetos y tercetos sin que nadie se diera cuenta de la diferencia, así como el hecho de que la gorda del domingo 8 tuviera dos apellidos y la del 29 uno solo no alteraba para nada la evidencia de que había una sola gorda que habitaba en diversas mansiones bajo diversos nombres y esposos, pero que de una manera que no dejaba de ser conmovedora escribía siempre el mismo soneto o casi. “Es pura fantaciencia —decía Calac—, en esos diarios están entrando en mutación, che, hay un protoplasma múltiple que todavía ignora que podría vivir pagando un solo alquiler. Los investigadores deberían provocar el encuentro nada fortuito del Sociólogo y de la Gorda para ver si se enciende la chispa genética y damos un terrible salto adelante.” Desde luego a Teodoro todo eso lo tenía bastante sin cuidado mientras le pusieran su taza de leche tibia al lado de la cama de Calac, que era el ágora donde se estudiaban esos problemas del destino sudamericano.

De La vuelta al día en ochenta mundos - Julio Cortázar. 

sábado, 26 de febrero de 2011

Jazzuela Le jazz dans Marelle

De Julio Cortázar

Recopilación de los temas mencionados en Rayuela.

Tracklist:
CAPÍTULO 10
1. Frank Trumbauer And His Orchestra - "I'm coming Virginia"
2. Bix Beiderbecke And His Gang - "Jazz me blues"

CAPÍTULO 11
3. Kansas City Six - "Four o'clock drag"
4. Lionel Hampton & His Orchestra - "Save it pretty Mamma"

CAPÍTULO 12
5. Coleman Hawkins - "Body and soul"
6. Dizzi Gilespie And His Orchestra - "Good bait"
7. Bessie Smith - "Baby doll"

CAPÍTULO 13
8. Bessie Smith - "Empty bed blues"
9. Louis Amstrong And His Orchestra - "Don't you play me cheap"
10. Louis Amstrong's All Stars - "Yellow dog blues"

CAPÍTULO 14
11. Louis Amstrong's All Stars - "Mahogany hall stomp"

CAPÍTULO 15
12. Big Bill Broonzy - "See see rider"
13. The Chocolate Dandies - "Blue interlude"
14. Champion Jack Dupree - "Junker's blues"

CAPÍTULO 16
15. Big Bill Broonzy - "Get back"
16. Duke Hellington And His Orchestra - "Hot and bothered"
17. Duke Hellington And His Orchestra - "It don't mean a thing"

CAPÍTULO 17
18. Earl Hines - "I ain't got nobody"
19. Jelly Roll Morton - "Mamie's blues"

CAPÍTULO 18
20.
Warning's Pennsylvanians - "Stack O'Lee blues"
21. Tenderly - "Oscar's blues"


"Sucede además que por el jazz salgo siempre a lo abierto, me libro del cangrejo de lo idéntico para ganar esponja y simultaneidad porosa."